No, no lo podrán frenar
Encuentro
Nadie tenía mechero, ni cerillas, pero Teresa encontró un interruptor que dio luz a una vieja bombilla que iluminó escasamente la pequeña estancia. Vicente encontró en el suelo una baraja de cartas del Tarot. Sacó una carta de entre el montón: la Luna.
-“¿Alguien sabe qué significa?”- preguntó. Fabián se encargó de responderle: “La Luna sugiere la presencia continua de la envidia, de la decepción, de los celos, del prejuicio en la vida cotidiana. Es una carta de aviso y peligro”. Al instante todos supimos porque estábamos allí encerrados.
Pues éste es el relato que leí en un programa de radio de Onda Madrid, tal como os expliqué hace dos posts. Fue una gran sorpresa que me llamaran para leerlo y comentarlo en antena, pero mayor fue mi sorpresa la semana pasada cuando me ofrecieron un contrato para incluirlo en un libro de mini-relatos.
El proyecto es comercializar la recopilación a través de internet y también editarla en formato libro. Cuando salga a la venta ya lo podéis ir comprando todos, porque me corresponderá un 5% del precio de cada ejemplar vendido.
Esta tarde he estado pensando que haré con los beneficios, si comprarme una casa con piscina o dedicarlo íntegramente a los negros del Congo.
Nadie tenía mechero, ni cerillas, pero Teresa encontró un interruptor que dio luz a una vieja bombilla que iluminó escasamente la pequeña estancia. Vicente encontró en el suelo una baraja de cartas del Tarot. Sacó una carta de entre el montón: la Luna.
-“¿Alguien sabe qué significa?”- preguntó. Fabián se encargó de responderle: “La Luna sugiere la presencia continua de la envidia, de la decepción, de los celos, del prejuicio en la vida cotidiana. Es una carta de aviso y peligro”. Al instante todos supimos porque estábamos allí encerrados.
Pues éste es el relato que leí en un programa de radio de Onda Madrid, tal como os expliqué hace dos posts. Fue una gran sorpresa que me llamaran para leerlo y comentarlo en antena, pero mayor fue mi sorpresa la semana pasada cuando me ofrecieron un contrato para incluirlo en un libro de mini-relatos.
El proyecto es comercializar la recopilación a través de internet y también editarla en formato libro. Cuando salga a la venta ya lo podéis ir comprando todos, porque me corresponderá un 5% del precio de cada ejemplar vendido.
Esta tarde he estado pensando que haré con los beneficios, si comprarme una casa con piscina o dedicarlo íntegramente a los negros del Congo.
Vuelve el No Pie. No podrán frenar el Arte.
